"Insistir, persistir, resistir y nunca desistir". Es uno de los lemas que representa la movilización con la que la Asociación Talaverana por unas Pensiones Dignas ha cumplido 200 lunes ininterrumpidos de lucha en la plaza del Pan por la defensa del sistema público de pensiones. "Más preciso, para que nuestras hijas, hijos, nietas y nietos tengan garantizado que cuando les llegue su edad de jubilación puedan disfrutar del derecho humano de cobrar una pensión que les permita vivir una vida digna de vivirse".
Así lo traslada a este medio el vicepresidente de la asociación, Juan Casamayor, quien explica que este lunes "ha habido más gente" de la que acude habitualmente a las concentraciones. "Ha sido un día alegre, de compañerismo, de amistad", añade, al tiempo que recuerda que en la pandemia, cuando no podían salir de casa, hacían fotos, leían un comunicado y publicaban un vídeo en las redes sociales, por lo que consideran que la movilización que emprendieron no se ha paralizado a pesar de no poder reunirse presencialmente durante algunos meses.
Casamayor subraya que la lucha de esta asociación, que nació como plataforma de pensionistas tras las movilizaciones que se iniciaron en el País Vasco, "no va encaminada" a sus pensiones sino a las "del futuro". "Los que la cobran hoy van a seguir cobrándola, el problema lo tendrán quienes están trabajando o estudiando hoy, que no van a tener nada en el futuro. Por eso hacemos mucho hincapié en que estudiantes, trabajadores y la sociedad civil esté con nosotros", agrega el representante de este colectivo.
Durante estos años de lucha, la Asociación Talaverana por unas Pensiones Dignas ha apoyado y se ha manifestado en múltiples ocasiones también para defender la sanidad pública, las residencias de mayores, los movimientos feministas, LGTBora o la defensa de un tren de calidad. La filosofía de la asociación, dicen, radica en esta frase: "no creo que seamos parientes muy cercanos, pero si usted es capaz de temblar de indignación cada vez que se comete una injusticia en el mundo, seremos compañeros que es más importante".
"En esta asociación en lucha hemos creado lazos de fraternidad, amistad, solidaridad muy estrechos, con personas que piensan diferente, que tienen creencias religiosas diferentes y votan diferentes opciones políticas", apunta la asociación, que reivindica como premisa principal de su funcionamiento "el respecto, la tolerancia, y la capacidad de escuchar a todas y todos dentro del colectivo".
"Junto al movimiento feminista, es el que más penetra en la idea de luchar en la calle por los derechos humanos"
El vicepresidente de la asociación señala que, junto al movimiento feminista, el que se ha generado para la defensa de unas pensiones dignas es el que "más penetra en la idea de luchar en la calle por los derechos humanos". "Hay muy pocos lugares en los que se mantiene la movilización como un arma (nunca bélica) para defender o exigir derechos. En Castilla-La Mancha no somos una comunidad como es el País Vasco, Catalunya o Andalucía, que son más combativos y predispuestos a defender derechos", agrega.
La asociación, que forma parte de la Coordinadora Estatal por la Defensa del Sistema Público de Pensiones (COESPE), sigue intentando hacer ver al conjunto de la sociedad que el sistema de pensiones en España es "un sistema solidario" ya que está "demostrado que es sostenible y que tendría un superávit alucinante" si los miles de millones de euros que distintos gobiernos han usado de "la mal llamada hucha de las pensiones" para "gastos ajenos" se reintegraran.
Auditoría de la Seguridad Social
"El Tribunal de Cuentas ha reconocido que desde 2008 a 2018 se han cogido 176.000 millones de euros para gastos ajenos. Y el propio ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha reconocido que se habían gastado 20.000 millones en cosas impropias", afirma Casamayor sobre los motivos que les hacen reclamar que se lleve a cabo una auditoría de las cuentas de la Seguridad Social.
"Pensamos que lo que se quiere es obligar a hacer creer a las personas que el sistema público de pensiones es insostenible, y al hacerlo público-privado, como se ha hecho en Alemania, Portugal, Estados Unidos o Chile se ha demostrado que es un desastre. En Chile, los fondos que gestionan ese dinero, fondos extranjeros o bancos, se fueron con el dinero aportada por los trabajadores y los dejaron en la calle. Y en Alemania perdieron hasta un 25% en el cobro de sus pensiones en comparación si hubiera seguido siendo público", manifiesta el vicepresidente de la asociación, que recuerda la lucha del colectivo para derogar la reforma laboral y la de las pensiones.
No obstante, durante estos años también se han obtenido logros tras sus reivindicaciones como es el incremento de las prestaciones según el nuevo índice de revalorización, que tiene en cuenta la media de los IPC del año, hasta noviembre. "Antes solo se subía el 0,25%, pero lo que marque el IPC tiene una condicionante y es que va a estar presentes mientras esté este gobierno. Nosotros pedimos que se haga una ley pues la subida de las pensiones no está regulada así, por lo que siempre va a estar la premisa de quién gobierne". Y es que, como dice otro de sus lemas, "gobierne quien gobierne, las pensiones públicas y los servicios públicos se defienden".