La Presidencia de la Junta de Castilla-La Mancha ha modificado el Anexo del Decreto relativo a la Distribución Municipal de las zonas de Inversión Territorial Integrada (ITI) Castila-La Mancha 2014-2020 a efectos de incorporar varios municipios a la zona ITI Toledo. Concretamente, según publica el DOCM, se incluyen esta zona las localidades de Santa Ana de Pusa, San Bartolomé de las Abiertas, San Martín de Pusa y Villarejo de Montalbán.
De igual modo, el Gobierno regional ha modificado la composición de los Subcomités Territoriales de Participación de la Inversión Territorial Integrada (ITI), a efectos de propiciar la incorporación de dos representantes del Tercer Sector de Acción Social de Castilla-La Mancha. Con ello pretende mejorar la representación de la sociedad civil en los referidos subcomités, integrando a entidades que promuevan “la inclusión social, la igualdad de oportunidades, el desarrollo humano sostenible y la no discriminación”.
En virtud de esta modificación, dos personas en representación de las asociaciones y entidades del Tercer Sector de Acción Social en Castilla-La Mancha, designadas por la Mesa del Tercer Sector de Castilla-La Mancha, se incorporarán a la gobernanza de las zonas ITI.
De esta forma, las zonas ITI, de conformidad con el Acuerdo de Consejo de Gobierno de abril de 2016, por el que se establecieron las áreas geográficas con necesidades específicas de desarrollo, las conforman, en la provincia de Toledo, la Comarca de Talavera y Comarca de la Campana de Oropesa, y en la provincia de Ciudad Real, la Comarca de Almadén y la de Campo de Montiel.
Núcleos de población de menos de 2.000 habitantes
Mientras, en la provincia de Albacete, la integran la Comarca de Sierra de Alcaraz y Campo de Montiel y Sierra del Segura, al tiempo que en Cuenca tendrán una actuación preferente los núcleos de población de menos de 2.000 habitantes. La provincia de Guadalajara será zona ITI, salvo el área de influencia del Corredor del Henares.
La referida zonificación y posterior municipalización tuvo como base el estudio realizado por la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, relativo a las comarcas en riesgo despoblamiento, que consideró como parámetros evaluables el elevado índice de ruralidad, las altas tasas de desempleo y declive socioeconómico, sumado a la ubicación en las zonas periféricas de la región y que coinciden en su mayoría desde el punto de vista geográfico con las zonas más abruptas, montañosas y de difícil acceso.
Estos condicionantes singularizaban estas zonas y urgían de una intervención para frenar el despoblamiento, propiciar el relevo generacional, dar continuidad a los pueblos, modificar el modelo socio-económico y ofrecer alternativas a la población para compensar los fuertes desequilibrios territoriales y sociales existentes.