La Delegación Provincial de Sanidad en Toledo ha emitido una Resolución que decreta el cierre del prostíbulo con sede en Ocaña, 'El conejo de la suerte', después de que el establecimiento viniera incumpliendo el decreto aprobado en agosto por el Gobierno regional para regular el funcionamiento del ocio nocturno debido a la COVID-19. Así lo han confirmado fuentes del Ejecutivo castellanomanchego a este medio. "Se notifica el cese de la actividad en base al artículo 24 del Decreto 49 que modifica el decreto 24/2020", señalan las mismas fuentes.
En esta normativa, que fue aprobada en un Consejo de Gobierno extraordinario, incluía el cierre completo, durante las 24 horas del día de los lugares de alterne o prostíbulos con independencia de su licencia de actividad.
El local de Ocaña había venido incumpliendo sistemáticamente desde entonces la norma. De hecho, días después de su entrada en vigor las llamadas ciudadanos alertaron de este hecho lo que provocó que el prostíbulo fuera objeto de una operación policial con más de 40 agentes en agosto. Guardia Civil de Toledo, en colaboración con la Policía Nacional y con personal de Inspección de Trabajo y Seguridad Social, entraron en el lugar identificando a 18 clientes y se iniciaron 42 expedientes.
Días después, ya en el mes de septiembre, Rosario Alises, feminista y médica en la Gerencia de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario en Ciudad Real volvía de denunciar que el establecimiento permanecía abierto y así lo trasladaba a distintas instituciones, incluyendo la Fiscalía de Castilla-La Mancha.
“Estoy constatando durante varios días que el prostíbulo llamado ‘Conejo de la Suerte’ en la A-4, en el kilómetro 56, dentro del término de Ocaña (Toledo) tiene sus puertas abiertas al público como queda atestiguado por el reclamo de sus luces de neón y la presencia de numerosos coches en su aparcamiento”, decía Alises en declaraciones a elDiarioclm.es. Este domingo, según ha comentado la propia Alises, el establecimiento estaba cerrado.