La Junta de Castilla-La Mancha contratará a un total de 51 trabajadores -18 trabajadores sociales, 18 educadores y 15 auxiliares administrativos- para desarrollar los servicios sociales de 15 áreas supramunicipales que agrupan a un total de 149 ayuntamientos de la provincia de Toledo.
Concretamente, estas áreas supramunicipales son Ajofrín, Belvís de la Jara, Borox, Cabañas de la Sagra, Calera y Chozas, Cebolla, Gerindote, La Guardia, Lominchar, Pepino, Polán, San Bartolomé de las Abiertas, San Pablo de los Montes, Valmojado y Villarrubia de Santiago. Así se ha firmado en distintos convenios de colaboración entre la Consejería de Bienestar Social y estas 15 áreas con los que se pretende garantizar en estas localidades el desarrollo de los programas y las prestaciones básicas de servicios sociales.
Además, estos contratos, que se sumarán a los 53 trabajadores sociales del Programa Regional de Acción social (PRAS), darán atención a un total de 226.240 habitantes de la provincia de Toledo.
El Programa Regional de Acción Social (PRAS) se implanta como modelo de financiación del ámbito supramunicipal, concertado entre la Consejería de Bienestar Social y agrupaciones de municipios de menos de 3.500 habitantes. Así, la Consejería asume la financiación del 99,98 por ciento del coste total del convenio y la entidad local aporta el 0,02 restante. Estas subvenciones para la ejecución de los programas sociales básicos de ámbito supramunicipal se dirigen fundamentalmente a cubrir los gastos de personal y al mantenimiento de los centros coordinadores de servicios sociales.
El director provincial de Bienestar Social, Gregorio Gómez Bolaños, ha asegurado que la firma de estos convenios es de "vital importancia" para estos ayuntamientos, pues la financiación que reciben les permite prestar y desarrollar los programas y prestaciones básicas de servicios sociales entre sus vecinos y vecinas, tan "necesarios para las personas más vulnerables".