Conocer la cultura de nuestra provincia pasa por visitar su patrimonio histórico. Al menos este es el objetivo con el que la Diputación de Toledo ha diseñado una ruta de casi 140 kilómetros por los que descubrir los tesoros que el reino visigodo construyó en la provincia.
“Intentamos organizar los elementos de valor patrimonial o cultural relevantes en tanto en cuanto que Toledo es la zona con mayor número de hitos visigodos. Los restos de nuestra provincia son distintos y complementarios y forman parte de la etapa en la que Toledo fue capital de un reino a partir del cual se crea España”, explica Julio Torres, adjunto a la Dirección del área de educación, cultura, turismo y deportes de la Diputación y miembro de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo.
San Martín de Montalbán con Melque, Orgaz con Hitos, Guadamur con Guarrazar o los restos de la propia ciudad de Toledo son algunos de los elementos históricos que el reino visigodo levantó en la provincia durante los siglos VI y VIII. “Forman parte de una oferta básica para el conocimiento del patrimonio de la etapa visigoda que se pueden ver y visitar” en su mayoría de forma gratuita, añade Torres.
Con el objetivo de “mejorar el acceso y el conocimiento de la cultura”, la Diputación de Toledo ha recogido en esta ruta templos, palacios, restos arqueológicos, pinturas o, incluso, piezas de ajuar. “Para aproximarse a una primera etapa del conocimiento de lo visigodo” Julio Torres recomienda comenzar la ruta en Melque. En este complejo el turista descubrirá una ermita visigoda en la que admirar “un monasterio muy bien conservado, un templo y alrededores con estructuras arqueológicas” que muestran cómo se organizaba la vida monástica de la época.
Buscando las huellas visigodas, aparecen los Hitos de Orgaz, un antiguo palacio de la monarquía visigoda. “Finalmente se transforma en un templo y, por proximidad geográfica, se asocia al templo de San Pedro en Sonseca, una zona con un gran hallazgo arqueológico relacionado con la etapa visigoda”, comenta Torres.
Las huellas de este antiguo reino podrían completarse con la visita al enclave de Guarrazar, en Guadamur, donde se encuentra “una gran basílica y un nuevo centro de interpretación con reproducciones de elementos artísticos y orfebrería”. En este hito se encontraron a mediados del siglo XIX tesoros visigodos como coronas y cruces.
Según Torres, “la ciudad de Toledo también tiene otros valores visigodos como la Vega Baja o el Museo de San Román, donde hay un programa explicativo de la etapa visigoda muy completo. En las calles se pueden encontrar piezas muy destacables del arte visigodo, visibles hoy en la ciudad”. Los testimonios históricos de la ciudad sirven, apunta Torres, como elementos explicativos de la vida artística, los concilios, la religiosidad e, incluso, la estructura jurídica.
Los colectivos como asociaciones o estudiantes pueden solicitar las ayudas para la actividad cultural y sufragar parcialmente los gastos de desplazamiento de esta ruta. “Conocer nuestros valores patrimoniales y lo que han supuesto en la historia, en el arte o en la político puede ser interesante para todo el público”, puntualiza el miembro de la Real Academia para animar a turistas y toledanos a realizar esta ruta turística.