Imagen de archivo del acto institucional con motivo del 25N / Fotografía: Ayuntamiento de Toledo
El Consejo Local de la Mujer de Toledo alerta, este primer martes del mes de junio, del “rearme” del machismo que “se está haciendo fuerte con la ayuda de algunos partidos que niegan la existencia de estos asesinatos demostrando la poca empatía que sienten hacia las mujeres”.
El grupo de Izquierda Unida-Podemos ha sido el encargado de emitir el comunicado de este mes en el marco del Consejo y ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para incidir sobre “una realidad que se vuelve tozuda y lamentablemente cruel, que nos está arrancando la vida de muchas mujeres y con ellas se va cada día un trocito de nuestro corazón”.
Ante el aumento de casos de asesinatos de mujeres en las últimas semanas se hace necesario ahondar en “la pasividad de algunas autoridades, la ineficacia de las medidas propuestas, el silencio o la negación de algunos partidos” y reclamar “armas legales y efectivas” para ello.
Y es que, según afirman en el manifiesto, estamos asistiendo a asesinatos de menores, de mujeres embarazadas, menores que son testigos de estos asesinatos, maltratadores con custodias compartidas y la utilización de los menores contra las madres.
Por todo ello, desde el Consejo Local de la Mujer han confiado hoy en que la Ley Integral de Protección de la Infancia sea un frente a la violencia y ayude a revertir esta situación.
Cambio de mentalidad y educación
Según el Consejo, es necesario el "cambio de mentalidad de algunos jueces, anular el bulo sobre las denuncias falsas y educación para comprender que el cuerpo de la mujer no es una mercancía, ni objeto de placer así como que asesinar no debe salir gratis o que el control y los celos no forman parte del amor”.
Desde IU-Podemos subrayan que la realidad de muchas mujeres está marcada por las violencias machistas así como por la prostitución, realidades como los vientres de alquiler, la pornografía o la difusión digital de los actos de violencia y asesinatos. "El sistema capitalista y patriarcal nos hace más vulnerables e indefensas”.
“Tenemos el mismo derecho que los hombres a pasear sin temor por las calles, a vestir sin miedo a ser atacadas o juzgadas, a utilizar un transporte público sin miradas que nos atemoricen o insinuaciones nada agradables. En definitiva, a disfrutar de la vida en igualdad de condiciones”, han recordado.
