Como todos los años, la asociación Consumeco Talavera decidió acercar sus talleres de verano a una realidad propia de la localidad. Mientras en 2015 fue la cerámica, un patrimonio indiscutible de la ciudad toledana, este año la temática ha sido el río Tajo. "Buscamos que los elementos importantes de nuestra ciudad no se pierdan", asegura Irene Brasero, presidenta de la asociación.
Un grupo de niños de entre 3 y 12 años participaron en este taller, para entender de "primera mano" la problemática por la que está pasando el río y los cambios que ha sufrido en la historia reciente. Para ello, Consumeco Talavera recibió la ayuda del club de Piragüismo de Talavera, quienes explicaron a los pequeños cómo el caudal del río ha tenido que ser modificado artificialmente para poder seguir practicando uno de los deportes que caracterizan a la ciudad.
"La idea es concienciar a los niños, para enseñarles que no tenemos que contaminar y ser más limpios", asegura Brasero. En este sentido, la monitora asegura los más jóvenes también deben conocer la historia de un río y saber que no "hasta hace mucho" sus padres y sus abuelos podían bañarse en la ribera del Tajo. "Queríamos mostrar cómo ha cambiado la playa de los Arenales que recibía a gente hasta hoy que la falta de caudal no permite que nos bañemos", explica.
Problemática que no era desconocida
"Muchos" de los niños que participaron en la actividad conocían hasta cierto punto la problemática del Tajo, lo que significa el trasvase y también la contaminación a la que se ha expuesto el río. Los pequeños también llevaron a cabo una "pequeña manifestación" en una de las excursiones que se incluían en el taller.
Junto al club de piragüistas, visitaron la playa de los Arenales donde no sólo vieron que los deportistas "apenas" podian moverse a través del agua, ya que las palas se quedan enganchadas con las algas en el fondo. "Hicieron pancartas para reivindicar el cuidado del río. Fue una pequeña manifestación pidiendo un río Tajo vivo y limpio", explica Brasero.
Miguel Ángel Sánchez, de la Plataforma en Defensa del Tajo, explica que si bien es "casi imposible" explicar la complejidad de la situación del río a los niños pequeños, la idea era contar las bases de la problemática. "El objetivo era explicar que la limpieza del agua no es automática, sin entrar en ningún caso en cuestiones políticas", señala el monitor ambiental. "Si preguntan si existen soluciones tenemos que dar ejemplos al detalle, pero dejando de lado los conflictos", concluye.
Un colectivo por la "eco-nomía" y la "eco-logía"
Consumeco Talavera lleva tres años trabajando en la Casa Ecológica de la localidad toledana, en colaboración con la Concejalía de Consumo del Ayuntamiento de Talavera de la Reina. "Nos basamos en el consumo eco-lógico y eco-nómico", asegura Brasero. En verano, son cinco monitores los que trabajan, entre educadores medioambientales, monitores de ocio, profesores de INEF y también piragüistas. "Estábamos muy interesados en el Medio Ambiente y queríamos enfocar un ocio para niños más barato, más sano y más saludable", aseguran.
