Firma del convenio para la instalación de fibra óptica / Ayuntamiento de Toledo
La conexión de fibra óptica será una realidad "inminente" para aquellos barrios de Toledo que todavía carecen de esta tecnología, como es el del Casco Histórico, donde el despliegue de banda ancha podría comenzar el próximo mes de mayo. Esta actuación convertirá a este barrio histórico en el primero de una Ciudad Patrimonio de la Humanidad en disponer de una infraestructura a la que tendrán acceso más de 3.600 viviendas y 900 empresas.
Así lo ha señalado la alcaldesa, de Milagros Tolón, tras la firma del convenio que ha llevado a cabo este lunes en el patio del Consistorio toledano con la directora de Grandes Clientes y Administraciones Públicas de la Zona Centro de Telefónica España, Beatriz Herranz, quien ha avanzado que el despliegue comenzará ahora en los barrios de Montesión, Pozuela-La Cerca y San Bernardo, barrios Vega Baja-Circo Romano y Banderas de Castilla, para continuardespués en el Casco Histórico, comenzando en el histórico barrio por la zona "de menos complejidad".
La instalación de fibra óptica favorecerá el acceso de unos 12.000 toledanos a la banda ancha gracias al proyecto que va a ejecutar Telefónica-Movistar hasta el año 2020, año en el que "un 95%" de la ciudad dispondrá de esta infraestructura, ha apuntado Tolón, que ha recordado que se trata de "un acto de justicia" que responde a "una de las principales demandas de los vecinos". Además, ha anunciado que están estudiando la implantación de la red en otras zonas de la ciudad como Vistahermosa.
La actuación que van a emprender ahora contará con unos 6,5 millones de euros -un millón solo para el Casco Histórico-, de los que aproximadamente "un 40%" están subvencionados con fondos europeos, una inversión que "ofrecerá oportunidades a todos", ha dicho la alcaldesa, que ha recalcado que "no es una tarea fácil hacer a una zona con configuración medieval la fibra óptica".
"Va a ser un referente para el resto de ciudades patrimonio, sobre todo para Santiago de Compostela", ha subrayado Tolón, que ha indicado que la ciudad gallega está concretando también otro proyecto de este tipo. "El convenio incluye una cláusula específica para la conservación de los edificios y del paisaje. Se va a llevar a cabo de forma muy rigurosa", ha agregado.
Canalizaciones existentes y retirada de cobre
Para acometer este despliegue en el Casco, la alcaldesa ha explicado que se van a aprovechar las canalizaciones existentes, así como los tendidos que ya hay instalados en las fachadas de los edificios, de las que, paulatinamente y según permita la ley, Telefónica se encargará también de retirar el cableado de cobre existente. Un trabajo "complicado y difícil" para el que todavía están ultimando el proyecto antes de decidir en qué zona del Casco comienzan a instalar la banda ancha, con la que intentarán también "minimizar" la cantidad de cable que necesitarán.
Aunque el despliegue de la fibra óptica se hará preferentemente utilizando estructuras subterráneas, excepcionalmente, y sólo donde no exista canalización subterránea susceptible de alojar redes de comunicaciones electrónicas o la que exista no pueda utilizarse por razones técnicas, el despliegue se realizará por las fachadas de los edificios (excluidos los que tengan categoría de Bien de Interés Cultural -BIC-) o mediante tendidos aéreos, siguiendo el mismo trazado de la red de comunicaciones electrónicas ya existente.
Esta instalación utilizará para su implantación en el Casco la zanja única, que "va aumentando a medida que se realiza cualquier obra", ha dicho Tolón, que ha señalado que actualmente una tercera parte de este barrio tiene zanja única.
