Castilla-La Mancha es una de las regiones españolas con mayor porcentaje de población envejecida, un motivo de “orgullo” según ha destacado hoy el presidente de la comunidad autónoma, Emiliano García-Page. Por eso ha adelantado que el objetivo primordial a corto plazo es que a finales de abril estén vacunadas contra la COVID-19 todas las personas mayores de 70 años junto con aquellas que tengan patologías previas.
Así lo ha afirmado García-Page justo en el día en que comienzan a administrarse en la región las dosis a los mayores de 80 años, el siguiente grupo de la primera fase tras los centros socio-sanitarios y el personal sanitario, entre otros. Tras afirmar que a día de hoy, en esta comunidad ya está vacunada el 80% de la población mayor de 95 años, ha realizado esta estimación para los los mayores de 70 años a finales de abril.
Según ha dicho, esto supondrá un “punto de inflexión”. “Habrá que seguir teniendo cuidado, pero lo cierto es que el traslado de este problema a hospitales y tanatorios va a cambiar radicalmente tras la primavera y en cuanto empiece el verano”, ha destacado, teniendo en cuenta que la media de letalidad del coronavirus se sitúa por encima de los 70 años de edad.