Las obras para la recuperación de la iluminación en el tramo del Puente de Castilla-La Mancha o puente atirantado en Talavera de la Reina han concluido después de que se quedara a oscuras por el vandalismo sufrido en las farolas.
Según ha informado la concejala de Ciudadanía e Imagen Sostenible de Ciudad de Talavera de la Reina, Montserrat Muro, para volver a normalidad ha sido necesario reponer alrededor de 1.300 metros de cableado, que fue robado o vandalizado.
Desde el equipo de Gobierno, ha comentado, se tiene el "compromiso de facilitar y habilitar espacios seguros dentro de la ciudad", como es el caso del tramo del puente atirantado, una zona en la que decenas de personas "lo aprovechan cada día para pasear, hacer deporte y otras actividades biosaludables", así como para disfrutar de las noches de verano.
Por supuesto, ha añadido, esta vía es muy utilizada también por conductores que necesitan las "mejores condiciones de visibilidad y seguridad".
Esta zona del puente atirantado es una conexión fundamental para evitar descongestionar el tráfico de la zona urbana de la ciudad, así como comunicación con la comarca de la Jara; una vía que, ha continuado, será un paso aún más frecuente cuando se cierre la circunvalación sur. El arreglo de las luminarias que fueron vandalismo ha supuesto una inversión de 21.500 euros para las arcas municipales, un dinero que "pagamos todos los talaveranos y talaveranas".
Además, desde el Ayuntamiento se han tenido que reparar las deficiencias en este mismo sentido, y también fruto del vandalismo y el robo, de otros puntos de la zona urbana de la ciudad. En muchos casos esta carencia de iluminación artificial nocturna se ha dilatado durante años.
Actuaciones en otras zonas urbanas de la ciudad
En los meses anteriores, ha señalado Muro, también se ha repuesto el cableado y recuperado la iluminación en el bulevar paralelo a la Avenida de Madrid (entre la rotonda del monumento homenaje a la ciudadanía y la del ICS), el bulevar Enrique Ginestal (en el PP-6), la calles Los Robles y entorno (en el barrio El Paredón) o el Cordel de Merinas, entre otros. En este caso, la inversión extraordinaria ha superado otros 8.000 euros.
Para la reposición de estas luminarias se han utilizado sistemas de prevención ante posibles robos, aunque la edil ha aprovechado para apelar al civismo y contra el vandalismo. Por eso, ha pedido a la ciudadanía que pongan con conocimiento de la autoridad policial cualquier cosa que pueda estar relacionada con el robo de cable o el vandalismo contra la iluminación; porque "esa insolidaridad de unos pocos nos afecta a todos".
Desde el equipo de Gobierno se viene informado del importante trabajo que se está realizando en esta materia, ya que se ha completado una actuación de sustitución de más de 6.000 luminarias por LED en toda la ciudad. Igualmente, se están iniciando ya los trabajos previos para actuar en obras de mejora de la eficiencia energética en edificios municipales.