Diez años han pasado desde el año en que se reconoce como el principio de la crisis económica española, 2008. Este jueves se conocen los datos de la Encuesta de Población Activa del segundo trimestre de 2018, el último año que el Ejecutivo de Emiliano García-Page gobernará por completo. Hacemos un repaso de cómo ha sido la evolución del paro y la ocupación en los siguientes gráficos que ofrecen una perspectiva clara de cómo ha afectado la crisis al mercado laboral en la región. Los datos hacen referencia al primer trimestre del año desde 2008.
El pico que se observa en 2013 muestra de forma significativa las consecuencias de la crisis y, también, de las políticas de empleo que llevó a cabo el PP en su Gobierno entre 2011 y 2015. El paro creció progresivamente, desde el 2008 al 2009, logró mantenerse con una crecida poco significativa entre 2009 y 2010 y entre 2011 y 2013 sufrió un disparo que se puede apreciar fácilmente. Los años que han seguido han mostrado un descenso del paro, pero que sigue lejos de llegar a los niveles anteriores a la crisis. El equipo de María Dolores Cospedal, sin embargo, defendió la gestión con lo que la oposición llamó "tasa Intercospedal", haciendo referencia a cómo el Ejecutivo insistía en hacer la comparativa con el año anterior.
Como es de esperar, la ocupación ha seguido una dinámica contraria al paro, y tampoco logra recuperarse para llegar a los niveles anteriores a 2008. De hecho, en el primer trimestre de 2018 todavía había más de 100.000 ocupados menos que hace diez años. La región ha sido líder en perder ocupados algunos años, pero también se ha situado entre las pocas que han logrado generar trabajo en otros, algo que Emiliano García-Page destacó en el último Debate de la Región celebrado el 2017, achacándolo a medidas como los Planes Extraordinarios de Empleo que se han llevado a cabo.
La caída de la ocupación entre los menores de 25 años ha sido aún más dramática, y está demostrando ser cada vez más difícil de paliar, a pesar de medidas destinadas exclusivamente a los jóvenes. Organizaciones como Comisiones Obreras han hecho especial hincapié en la pérdida de empleo entre los jóvenes, destacando que uno de los problemas es la pérdida de talento que sufre la región desde los inicios de la crisis.
La misma dinámica ha seguido el paro entre los jóvenes de 16 a 24 años. Sin embargo, desde 2015 se puede observar una bajada entre estos desempleados, que los sindicatos no han achacado a la creación de empleo, sino a que abandonan la región, cifrándolo en unas 17.000 personas. Desde el Gobierno regional han destacado que la región es la cuarta en la que más bajó el paro juvenil a lo largo de 2017.