La vicepresidenta cuarta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha asegurado que la bajada del IVA de la electricidad del 21% al 10% y la suspensión del impuesto del 7% a la generación, aprobados este jueves por el Gobierno y que este viernes han sido publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), se notarán en la factura de los consumidores "enseguida", desde "el próximo recibo".
En una entrevista en TVE recogida por Europa Press, Ribera señaló así que en el próximo recibo habrá que fijarse "en esa última línea que aparece sobre IVA y lo veremos reducido", ya que afectará a los consumos a partir de este 26 de junio.
En lo que se refiere a la suspensión durante tres meses del impuesto del 7% a la generación, indicó que ya en 2018, cuando el Gobierno también lo aplicó temporalmente, se repercutió "inmediatamente" en todas las facturas".
No obstante, advirtió de que las compañías cuando ofrecen tarifas fijas pueden querer pretender no descontarlo, por lo que estimó que "es muy importante fijarse en la factura y reclamar ese descuento".
En el caso de los autónomos, señaló que los que tengan una potencia contratada hasta 10 kilovatios (kW), "que ya tiene cierta consideración, sí que verán el cambio".
Respecto al impacto en estos consumidores del nuevo esquema de tarificación horaria que entró en vigor el pasado 1 de junio, Ribera reconoció que hay una serie de consumos fijos, como neveras o congeladores, que son "muy difíciles de trasladar a otra hora".
"Lo que quiso hacer la CNMC es modelizar los distintos tipos de consumidores y tarifas y trasladar parte de esas señales y poder elegir los tramos horarios en que se puede trasladar esos consumos como un elemento incentivador, no penalizador", añadió.
De todas maneras, recordó que se ha pedido al regulador que lleve a cabo un seguimiento de la aplicación de estas tarifas por si pudiera existir "algún tipo de distorsión".
Autoconsumo y subvenciones
Por otra parte, Ribera afirmó que el próximo martes el Consejo de Ministros aprobará un plan de ayudas para impulsar el autoconsumo y subvencionar los acumuladores detrás del contador, que pueden permitir a los consumidores contar con "una especie de batería", y los sistemas de climatización y agua caliente sanitaria.
La ministra defendió también la necesidad de "velar por la rápida transformación de nuestro sistema eléctrico", a la vez que se controla su fiscalidad, y afirmó que la decisión de prolongar la bajada de IVA dependerá de ver cómo evolucionan los precios.
Dentro de esta reforma estructural en la que trabaja el Gobierno, volvió a defender la propuesta para minorar los llamados 'beneficios caídos del cielo' de las nucleares y las hidráulicas, ya que "las compañías deben aportar parte de los dividendos de la transformación", y que valga además para reducir el precio de la factura.