La fotografía 'Innombrables' de la trabajadora social Alba Montero Muñoz ha recibido el premio a mejor fotografía, dotado con 200 euros, en los premios anuales de Fotografía Social de Castilla-La Mancha que otorga el Colegio Oficial de Trabajo Social y patrocinan elDiario.es Castilla-La Mancha y Globalcaja. El certamen cuenta con la colaboración de de Amnistía Internacional Castilla-La Mancha y EAPN - Red de Lucha Contra la Pobreza en Castilla-La Mancha.
La fotografía pone de manifiesto la desprotección a las que se han visto sometidas las mujeres en situación de prostitución durante la pandemia debido al desamparo al que se han enfrentado, por el contagio y por la presión para seguir exponiéndose en pisos.
Mujeres en una situación de "gran vulnerabilidad" a las que el confinamiento ha afectado "muy duramente" viendo como crecía su deuda y con ello su "dependencia" de las redes que las explotan; otras han sido expulsadas de sus lugares de residencia y también se han detectado situaciones de carencia de recursos para atender las necesidades básicas.
En Castilla La Mancha, recuerdan desde el Colegio, son alrededor de 2.200, que se reparten entre los 83 clubes de la región -ahora cerrados-, alrededor de un centenar de pisos y algunos espacios de la calle, estos últimos "muy minoritarios" debido a algunas ordenanzas municipales. 5 entidades sociales trabajan con éste colectivo de mujeres. Durante la pandemia el gobierno regional ha aprobado un fondo de ayudas de 300.000 euros para apoyar a las mujeres en situación de prostitución y a las víctimas de trata afectadas por la crisis sanitaria de COVID-19 y acabo decretando el cierre de prostíbulos el 21 de agosto.
Por otro lado, 'Acaríciame. Con la mirada, con el gesto, con el alma' de la trabajadora social María Cristina Navarro Gómez -natural de Las Pedroñeras (Cuenca)- ha recibido el premio a la mejor colección, dotado con 300 euros. La colección muestra algunas instantáneas tomadas durante los meses de confinamiento en la Residencia de Mayores de Puertollano (Ciudad Real). La autora ha destacado la importancia del trabajo desarrollado por el equipo profesional acompañando a las personas mayores en esta situación, aportando calidad humana y cercanía con su trabajo.
La pandemia por la COVID-19 ha tenido especial incidencia en las residencias de mayores, constituyendo focos vulnerables de contagios que han requerido de medidas especiales de prevención. Las visitas de familiares fueron restringidas hasta la Fase 3 del Plan de transición hacia la nueva normalidad. Se estima que han muerto más de 20.800 personas mayores por COVID-19 o síntomas compatibles en Residencias de Mayores a nivel nacional. En Castilla-La Mancha se han notificado 2.595 muertos con coronavirus o síntomas compatibles en residencias desde el inicio del brote. Esta cifra representa un 79,19% del total de fallecidos en la comunidad autónoma.
En su cuarta edición han participado 15 profesionales del Trabajo Social de la región y las fotografías presentadas han estado relacionadas con el trabajo realizado durante los meses de confinamiento, destacando la importancia de la profesión en la lucha contra las consecuencias de la pandemia por covid-19, y que ha conllevado que los Servicios Sociales sean declarados servicios esenciales durante el estado de alarma.