El Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM) publicará este martes, día 17 de mayo, la resolución de la Viceconsejería de Cultura y Deportes por la que se inicia el expediente para declarar Bien de Interés Cultural (BIC) la iglesia de la ‘Asunción de Nuestra Señora’ en Nombela (Toledo), con la categoría de Monumento.
La consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, ha hecho este anuncio en una visita que ha realizado al templo del municipio toledano, en la que ha estado acompañada del delegado de la Junta en la provincia, Javier Úbeda; del delegado de Educación, Cultura y Deportes, José Gutiérrez; y del alcalde de Nombela, Carlos Gutiérrez, entre otros asistentes.
En sus declaraciones, Rosa Ana Rodríguez ha explicado que, con esta declaración, “seguimos protegiendo y conservando lo mejor de nuestro patrimonio para ponerlo en valor y para salvaguardar los bines que nos identifican culturalmente como autonomía”.
Asimismo, Rosa Ana Rodríguez ha destacado que “la declaración de este monumento como BIC es la primera parte de un conjunto de actuaciones que vamos a desarrollar en el inmueble y que culminarán con la conservación del retablo mayor de la iglesia, gracias a una inversión de 150.000 euros procedente de los Mecanismos de Recuperación y Resiliencia”.
En concreto, la rehabilitación del retablo consistirá en la realización de estudios previos, consolidación y fijación de estratos pictóricos, limpieza y restauración del soporte y tratamiento de los estratos pictóricos.
La iglesia de la ‘Asunción de Nuestra Señora’
La iglesia de la ‘Asunción de Nuestra Señora’, en Nombela (Toledo), construida en el siglo XVI, en un estilo renacentista con reminiscencias góticas, se configura como un edificio de planta rectangular con tres naves, divididas, a su vez, en cuatro tramos, con cabecero poligonal y coro a los pies.
En su interior, destaca su retablo mayor, de estilo plateresco, de mediados del siglo XVI y autor desconocido, de dimensiones aproximadas de 9 por 6 metros. En su cuerpo central se levanta una talla de la Asunción de Nuestra Señora, patrona de la villa, obra de un escultor oriundo, José Zazo y Mayo.
Además de este retablo mayor, la iglesia conserva otros retablos y ornamentos de la misma cronología, lo que hace que la misma pueda ser considerada como ejemplo singular y sobresaliente de templo religioso de la segunda mitad del siglo XVI conservado con su imaginería y ornamentos litúrgicos.