La tercera ronda del estudio de seroprevalencia frente a la COVID-19 realizado por el Ministerio de Sanidad muestra que la inmunidad frente a la enfermedad en la provincia de Toledo ha caído del 8,9 al 8,6% en esta última ronda, respecto a la primera del documento llamado ENE-COVID. En concreto, es la provincia en la que menos ha descendido este porcentaje de inmunidad en toda la región.
Castilla-La Mancha, en su conjunto, ha caído hasta el 9,6% de la población. Se trata de una bajada de ocho décimas, en relación a la primera ronda del mismo análisis, que situó la seroprevalencia de la comunidad en un 10,4%. El número de sujetos analizados ha caído también desde 5065 hasta los 4944 del último estudio.
A pesar de que la prevalencia de anticuerpos ha bajado en la región, Castilla-La Mancha es la segunda de las regiones que más inmunidad presenta, sólo por debajo de Madrid, con un 11,7%. Le sigue Castilla y León, con un 7,8% , y Navarra con un 6,6%.
El documento del Ministerio señala que se observa un "patrón muy similar", en referencia a las zonas del entorno de la comunidad de Madrid, ya que es en este territorio en el que se concentran las provincias con prevalencias "cercanas o superiores" al 10%. Sin embargo, en la costa, Andalucía o las islas, la inmunidad no llega al 5% de la población.
Situación por provincias en la región
Por provincias, Albacete ha bajado en su prevalencia de anticuerpos de un 11,7% de la población, según la primera ronda, hasta el 10,8% de esta última.
Una bajada similar se ha vivido en Ciudad Real, que ha pasado de un 10,2% hasta el 9,1%, a pesar de ser una de las provincias más afectadas por la pandemia. Cabe recordar que Tomelloso, una de las localidades con más fallecidos por la crisis, se encuentra en Ciudad Real.
En el caso contrario se encuentra Cuenca, que fue una de las primeras provincias de la región en pasar de fase. La seroprevalencia ha bajado aún más entre la población conquense, pasando de un 13,2% hasta el 11,4%.
Guadalajara fue la otra provincia que más rápido avanzó gracias a la estabilidad de la situación sanitaria. En este caso, la prevalencia ha bajado un poco menos que en el resto de las provincias, pasando de un 10,4 hasta el 9,8%.
El estudio del Ministerio de Sanidad señala que no se aprecian "diferencias importantes" entre hombres y mujeres, ni tampoco según la nacionalidad o el número de personas con el que se convivan. Eso sí, se señala que las personas que han tenido contacto con casos confirmados de COVID-19, "en diferentes ámbitos", muesrtan prevalencias más altas de anticuerpos, y que en el caso de los conviventes, la seroprevalencia es de entre 27 y 31%.