La talaverana Susana Guerrero ha sido finalmente absuelta de los delitos de denuncia falsa y simulación de delito que el padre de su hija le interpuso tras denunciarle ella por presuntos abusos sexuales a la hija de ambos, de 12 años. El progenitor ya fue condenado en firme por violencia de género en 2008. Guerrero se enfrentaba a una petición de dos años de cárcel por parte de la Fiscalía por esta acusación de denuncia falsa.
Fue el Juzgado de Instrucción número 1 de Talavera de la Reina (Toledo) quien inició nuevas diligencias previas contra Susana Guerrero, la madre talaverana que mantiene abierta otra batalla judicial contra el padre de su hija por negarse a entregar la custodia de la menor.
El último episodio se produjo el pasado 1 de marzo cuando Guerrero se sentó en el banquillo de los acusados, en esta ocasión debido al juicio por presunta denuncia falsa contra su maltratador y que presumiblemente también cometió abusos contra su hija Naiara. Más de un centenar de colectivos entre organizaciones, plataformas, asociaciones y partidos políticos se unieron ese día para gritar "ante la indefensión que sufre la mujer y la infancia en los procesos de violencia machista", bajo la campaña #HabloPorElla.
El Juzgado de Instrucción número 1 de Talavera de la Reina (Toledo) inició este procedimiento en junio de 2016 por un presunto delito de denuncia falsa contra el padre por abusos sexuales hacia la menor. Susana Guerrero afirmó entonces que se trataba de una "maniobra" más para ratificar la sentencia que había concedido la custodia de la menor al padre, y que después fue revocada por la Audiencia de Toledo y por el Tribunal Supremo.
Actualmente, es Susana quien tiene la custodia de Naiara. Precisamente, el proceso judicial de la custodia fue el que supuso todo un "calvario judicial" para la talaverana. Al hilo de esta acusación de denuncia falsa, afirmó también que se había "manipulado toda la documentación" con cosas que ella no había firmado pero que aparecían consignadas. El juicio al que ahora se enfrenta procede de la denuncia que Susana afirma que presentó su madre, Filomena Rodríguez, el 15 de marzo de 2013 contra el padre de la niña por abusos sexuales contra la pequeña.
Izquierda Unida se ha referido a este caso señalando que es “uno de tantos desastres judiciales silenciados en España, que nos sitúa ante un maltratador con sentencia firme y un presunto depredador sexual que sienta a unas de sus víctimas, al amparo de la Fiscalía, con la pretensión de condenar por denuncia falsa de abusos sexuales a quien fuera ingresada a sus 14 años con un cuadro claro de agresión sexual, producido por quien será usado como testigo de la Fiscalía”.