La quinta de ola de COVID-19 no ha frenado la recuperación de la actividad turística en el país. A pesar de los contagios -7.215 entre el 1 y el 23 de agosto, según los datos de la Consejería de Sanidad- y fallecimientos -43 en las mismas fechas- registrados en toda la provincia de Toledo, los datos recopilados de visitas a las oficinas municipales de turismo en la capital regional, y de viajeros y de ocupación hotelera en la provincia, evidencian el impulso de este sector tras la crisis que vive desde el inicio de la pandemia.
En concreto, según las cifras expuestas por la concejala de Turismo del Ayuntamiento de Toledo, Mar Álvarez, un total de 30.777 personas han pasado por las oficinas municipales de turismo durante los meses de junio, julio y agosto, a falta de unos días para completar este último mes. Son 11.311 más que en el mismo período de 2019 -19.466 visitas-.
La mayoría de los turistas que han venido a Toledo son residentes en España -el 73%, unas 22.400 personas-, siendo Madrid, Barcelona y Valencia los principales emisores de visitantes nacionales. El 27% de turismo internacional -alrededor de 8.300 personas- proviene principalmente de Francia, Estados Unidos y México, ha agregado Álvarez. Además, ha subrayado que "los visitantes individuales y las familias prevalecen frente a los visitantes en grupo debido a la afección de la pandemia" en el turismo que proviene de otros países.
"Hemos acertado en la oferta turística y cultural y, además, tenemos que agradecer a los empresarios del sector que han sabido adaptarse al nuevo escenario”, ha dicho la concejala, para añadir que entre todos “estamos empezando a salir de la situación excepcional de los últimos meses".
Así, ha destacado también que "dentro de la prudencia que requiere la situación pandémica", se "puede reiterar que Toledo cuenta esta temporada estival con buenas cifras turísticas". Además, en la comparativa de junio y julio de 2019, año preCOVID, muestra que "se ha duplicado el número de visitantes, pasando de una media de 6.000 turistas atendidos en la oficina municipal a 12.000".
"Estamos recuperando el pulso turístico de la ciudad de Toledo, ya en el mes de junio apuntábamos a cifras de visitantes similares a las del año 2019, el último año en el que las cifras no estaban sesgadas por la COVID-19", una tendencia al alza que como ha reiterado la responsable municipal de Turismo arroja cifras que alcanza ya los 40.000 visitantes en temporada estival, teniendo en cuenta que estos datos contabilizan sólo el número de personas que han pasado por la Oficina de Información Turística del Ayuntamiento.
La provincia supera los 60.000 viajeros
Por su parte, en julio de este año, Castilla-La Mancha recibió 174.549 viajeros, un 66,5% más que el mismo mes durante el 2020, el año más azotado por la COVID-19. Se trata de datos optimistas, recalcan desde el Gobierno regional, y que están por encima de la media nacional. Especialmente reseñable es el de la provincia de Toledo, en el que el número de viajeros se ha más que duplicado hasta llegar a los 61.074.
Al igual que los datos recopilados en las oficinas de turismo de la capital castellanomanchega, mientras el número de turistas con residencia en el extranjero es menos de la mitad que hace dos años y apenas 8.000 visitantes más que en 2020, el turismo local ha sido el que más ha crecido en la región. Los visitantes desde España se acercan ya este año al de 2019: sólo han sido 5.000 menos que hace dos años y 60.000 más que en 2020. En Toledo, por ejemplo, se ha duplicado el número de visitante extranjero, pero sigue siendo menos de la mitad de lo que la provincia recibió en 2019. En cuanto a las pernoctaciones, también han crecido en un 60% en toda la región y son más del doble que las registradas en 2020 en el caso de la provincia de Toledo.
Establecimientos hosteleros abiertos
Otro dato que llama al optimismo en el sector hostelero es el de número de establecimientos abiertos y también el de personal empleado. Actualmente, son 673 los lugares que se consideran como establecimiento hotelero que están abiertos en la región, y son 60 más que el año pasado, aunque también son 70 menos que hace dos años.
En Guadalajara sólo han abierto dos más que el año pasado, mientras que en Cuenca han sido 12. En Ciudad Real hay 13 establecimientos más, en Albacete son 12 y en Toledo 27. En cuanto al personal empleado en estos establecimientos, hay 500 personas menos trabajando en este sector que en 2019, pero también 500 más que hace un año.
La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, Patricia Franco, ha considerado con optimismo los datos de ocupación hotelera y pernoctaciones haciendo retrospectiva a julio de 2019 donde, en comparación, los datos de la región muestran una recuperación mejor que la del conjunto de España. "Estamos viviendo ya la recuperación tras esta crisis tan dura, la tendencia está siendo positiva y el impacto de esta crisis en Castilla-La Mancha es, en términos de magnitud, inferior en cuanto a impacto económico respecto a lo que percibimos en otras regiones españolas", ha destacado.