Las distintas organizaciones agrarias y cooperativas de Castilla-La Mancha han valorado muy positivamente la ratificación del Francisco Martínez Arroyo al frente de nuevo de la Consejería de Agricultura para dar continuidad a las políticas que se han desarrollado en estos cuatro años y la asunción también de las competencias en materia de agua. La Consejería pasará a llamarse de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural.
A juicio de las distintas organizaciones consultadas por AgroalimentariaCLM, es muy importante que el agua se vincule no sólo a la agricultura sino también al desarrollo rural. Así, para el responsable de Cooperativas Agroalimentarias en Castilla-LA Mancha, Juan Miguel del Real, “hablar de agua y desarrollo rural va muy de la mano en una región como la nuestra”.
En el mismo sentido, se han manifestado tanto el secretario regional de UPA, Julián Morcillo, como Arturo Serrano, secretario general técnico de ASAJA, ya que unir estas competencia con la agricultura ha sido una reivindicación de estas organizaciones agrarias al considerar que es un tema fundamental puesto que “el 80% del agua que se consume es para uso agrario”, según ha recordado ASAJA.
Consolidar políticas
Las organizaciones han valorado también la importancia de la continuidad en la Consejería con el fin de consolidar algunas políticas que ya se iniciaron en la pasada legislatura. Para Cooperativas lo más destacado es seguir en la senda de la concentración de la oferta comercial con las política de apoyo al desarrollo cooperativo y al fomento a la integración, con la puesta en marcha de dos herramientas que “han sido fundamentales para el sector: las Entidades Asociación Prioritarias de Interés regional (EAPIR) y las agrupaciones de productores”.
A juicio de Juan Miguel del Real, es importante seguir con esta política que ha dado como resultado la creación de cinco EAPIR y diez agrupaciones lo que “permitirá avanzar hacia mercados de más valor, donde se puedan defender mejor los productos de nuestras cooperativas”.
También han valorado la continuidad porque da estabilidad al sector y por el buen nivel de interlocución que han mantenido con Francisco Martínez Arroyo.
Temas para una nueva legislatura
Respecto a los asuntos pendientes para esta legislatura que empieza, las organizaciones han destacado la negociación de la próxima PAC y la planificación hidrológica, principalmente.
Así, Julián Morcillo ha recordado la necesidad de “dar un solución a los pozos del Alto Guadiana, uno de los compromisos que quedaron por cumplir”, además de estar atentos a todo el proceso de planificación hidrológica “en la que la región siempre ha saldo malparada”, pero “ahora tenemos una oportunidad ya que a partir de verano van a salir a exposición pública los cuatro demarcaciones más grandes de la región que afectan a la disponibilidad de recursos de nuestro agricultores”.
Respecto a la PAC y el nuevo Plan de Desarrollo, las organizaciones han destacado la necesidad seguir manteniendo una posición clara y común en torno a estos dos retos europeos.
Cooperativas Agroalimentarias ha recordado que hay aspecto importantes para defender como es la convergencia en los pagos de la PAC por hectárea entre todas las regiones de España y que Castilla-La Mancha pueda converger a un valor medio más alto en pagos por hectárea; la importancia de que las organizaciones de productores que ahora están reservados a algunos sectores se abra al resto de sector y que el presupuesto se mantenga”.
Asimismo, UPA ha recordado algunos temas pendientes que hay que consolidar como la nueva ley de la viña y el vino, la adaptación de la ley de la venta directa, y hacer un esfuerzo para mantener el sistema de seguros agrarios y hacerlo más viable.
Para ASAJA, uno de los temas para abordar en esta nueva legislatura es dar estabilidad en la gestión de las ayudas, ya que “un retraso de tres meses para un ganadera o un agricultor puede suponer la viabilidad económica de una explotación”.
También considera que hay que “acabar con las medidas conservacionistas que han sido nuestro gran caballo de batalla, la principal discrepancia con la Consejería. Para respetar el medioambiente no hay que limitar la capacidad productiva ya que puede hacerse compatible, no podemos paralizar el progreso del mundo rural”, ha señalado Arturo Serrano.