La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado un nuevo "colapso" en el Servicio de Urgencias del Hospital Universitario de Toledo (HUT), con 51 pacientes a la espera de ingreso -49 según UGT- este lunes y con profesionales "desbordados por falta de recursos".
El sindicato ha lamentado en nota de prensa que "la falta de previsión y una incorrecta organización" lleve a la "persistencia" de los mismos problemas que se padecían en el Hospital Virgen de la Salud, donde estos episodios de saturación eran recurrentes. No en vano, el Servicio de Urgencias del HUT, a pesar de su mayor superficie, cuenta con menos puestos para pacientes encamados que el Virgen de la Salud, lo que de hecho obligó este domingo a trasladar 12 camas a este espacio, han manifestado.
A ello se suma, han señalado, que la Gerencia cerró el pasado 1 de junio la planta F4P5, dedicada a la atención de pacientes con coronavirus, lo que provoca que haya menos camas de hospitalización para hacer frente a los afectados por la pandemia. Es más, la Gerencia tiene previsto cerrar próximamente la planta F4P6, también para pacientes COVID, han criticado.
La responsable del Sector de Sanidad de CSIF Toledo, Marisa García, ha explicado que el "motivo del cierre de cualquier zona COVID es para que los profesionales asignados cubran los periodos vacacionales de compañeros de otros servicios", por lo que "la clausura se debe a motivos económicos, mientras que Urgencias padece con toda su dureza esta falta de personal".
El resultado, ha concluido García, es que "este Servicio se sature y los profesionales se encuentren desbordados, al límite". "Parece que no hemos aprendido nada de la pandemia", ha finalizado.
"No es normal que estas cosas sigan ocurriendo en un hospital nuevo"
UGT también denuncia "la saturación que se vive estos días en las Urgencias del Hospital Universitario de Toledo" y lamenta que las esperas en esta unidad se sigan produciendo "a pesar de la apertura del nuevo hospital".
Inés Pedreño, responsable de Sanidad de UGT Servicios Públicos en Toledo, explica que -por parte de la dirección- "se está procediendo a reducir el personal y a cerrar una planta, lo cual está agravando la situación de las Urgencias". "No es normal que estas cosas sigan ocurriendo en un hospital que es nuevo", agrega.
Inés Pedreño añade que hace 10 días el sindicato pidió una reunión con la subdirectora responsable de Urgencias y que, a día de hoy, aún no se ha producido tal encuentro. También ponía de manifiesto "el malestar que esta situación está generando entre los pacientes, así como el desgaste y el estrés que sufren los profesionales de la Sanidad".
Satse señala que se debe al cierre de 38 camas
Según ha trasladado posteriormente el Sindicato de Enfermería (Satse), la acumulación de "53 pacientes" en el servicio de Urgencias a la espera de ingreso se debe al cierre durante este pasado fin de semana de una planta de hospitalización con 38 camas.
"Ha sido necesario distribuir por todas las zonas asistenciales de Urgencias, que es la puerta de entrada del hospital y el lugar, por tanto, que debe tener asegurada al máximo la capacidad de reacción, a los pacientes a la espera de una cama libre", ha explicado el sindicato.
Para Satse esta situación resulta "tan insólita como indignante, al haberse producido ya el traslado desde el antiguo hospital Virgen de la Salud al nuevo Hospital Universitario de Toledo, considerado como uno de los cinco hospitales públicos más grandes de España, con 853 camas y 25 quirófanos, y aun así, pacientes y profesionales siguen padeciendo los problemas de cuidados y de falta de seguridad y calidad asistencial que supone dejar a un paciente que requiere de una cama hospitalaria a la espera de la misma más de 24 horas".
Por ello, el Sindicato de Enfermería reclama "la apertura urgente de todas las camas de las que dispone el Hospital Universitario de Toledo, con el fin de poder dar respuesta a las necesidades asistenciales que tiene la ciudad y su comarca".
Además, desde SATSE se exige que se garantice el número de presencias de enfermeras en todas las unidades para proporcionar seguridad y calidad en la asistencia que se presta a los pacientes, asegurando a su vez a los profesionales unas condiciones dignas y seguras en su puesto de trabajo.