Puede resultar muy sencillo y fascinante abrir un libro. Descubrir poco a poco lo que cuenta y adentrarse en su historia, sus personajes, sus descripciones y acciones. Pero no es así siempre ni en todos los casos. La personas con algún tipo de discapacidad intelectual o con diversidad funcional, las personas mayores, las migrantes o las que tienen un bajo grado de alfabetización se enfrentan a veces a la imposibilidad de comprender al cien por cien lo que leen. Para combatir esta desigualdad existe el método de 'Lectura Fácil': un conjunto de pautas y recomendaciones relativas a la redacción de textos, al diseño y maquetación de documentos y a la validación de la comprensibilidad de los mismos, destinado a hacer accesible la información a las personas con dificultades de comprensión lectora.
Con motivo del Día Internacional del Libro, explicamos cómo funciona esta herramienta y exponemos algunos ejemplos de once inicios de libros extraídos de la literatura universal. Es un trabajo que ha realizado para elDiarioclm.es la asociación Plena Inclusión de Castilla-La Mancha, una de las más activas de España en el trabajo para la accesibilidad de los documentos de las administraciones públicas.
Estos son los textos de arranque de novelas muy conocidas que este colectivo ha adaptado a Lectura Fácil:
'Cien años de soledad', de Gabriel García Márquez
'Historia de dos ciudades', de Charles Dickens
'El cuento de la criada', de Margaret Atwood
'La familia de Pascual Duarte', de Camilo José Cela
'Don Quijote de la Mancha', de Miguel de Cervantes
'La metamorfosis', de Franz Kafka
'Nada', de Carmen Laforet
'El diario de Ana Frank'
'El hobbit', de J.R.R. Tolkien
'El corazón es un cazador solitario', de Carson McCullers
'Platero y yo', de Juan Ramón Jiménez
Hay una serie de pautas que se repiten en todos estos ejemplos: seguir un orden lógico en la exposición de los acontecimientos y relatar las acciones de la forma más natural posible. El lenguaje debe ser sencillo, pero no infantilizado, aunque sí que deben evitarse las abstracciones, utilizando ejemplos siempre que sea posible. En cuanto a la forma, es fundamental utilizar un tipo de letra grande y márgenes e interlineado generosos. Acompañar el texto con imágenes que puedan favorecer la comprensión también ayuda a la accesibilidad.
Estos son algunos de los métodos que utiliza el Servicio de Accesibilidad Cognitiva 'Entorno Fácil' de Plena Inclusión Castilla-La Mancha, el único existente en la comunidad autónoma. Lorena Pérez de Vargas, Manuel Pimentel, Manuel Reyes, Noelia Almendros, Marta y Yoel Blanco y Marta De Agustón son los encargados de adaptar textos a lectura fácil. También evalúan y dan soluciones para mejorar la accesibilidad cognitiva de espacios públicos y otros entornos. Por su parte, Jonathan Vico, maquetador y diseñador, se encarga de dar forma a los documentos, ilustrarlos y maquetarlos y de diseñar las señales para mejorar los entornos. Los técnicos Raquel Arce y Ricardo Barceló se encargan de coordinar el servicio. 'Entorno Fácil' tiene tres grupos de validación con las entidades de la federación Ada, Apam y Afamit.
El hito más importante de este servicio fue la adaptación del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha, pero también tienen otros trabajos destacados como la guía de turismo de Ciudad Real, las ordenanzas más importantes de Olías del Rey (Toledo), una guía de acogida para migrantes y ocho programas electorales de distintos partidos políticos, labores de accesibilidad del Ayuntamiento de Ciudad Real y también de centros sociales y cívicos de otros municipios. Actualmente, están trabajando en estos métodos con el Ayuntamiento de Toledo.
En Plena Inclusión resaltan que la accesibilidad cognitiva nos beneficia a todos
pero especialmente:
A las personas con discapacidad intelectual.
A las personas mayores.
A las personas con un bajo nivel de alfabetización.
A los extranjeros que no dominan el idioma.
Hablamos de un 30% de la población.
Su importancia es muy grande.
La lectura fácil es más conocimiento
y más igualdad.