Los 39 conserjes del Museo del Ejército del Alcázar de Toledo iniciarán el fin de semana del 6 y 7 de agosto una huelga indefinida que se prolongará todos los sábados y domingos sucesivos, con paros de dos horas de duración entre las 12.00 y las 14.00 horas. La huelga ha sido convocada por CCOO para exigir a la empresa Proman el pago de las dos mensualidades que debe a la plantilla.
La huelga exigirá también el cumplimiento del compromiso de regularizar el pago de las nóminas que Proman asumió ante la Inspección de Trabajo el pasado abril. El sindicato ha señalado que la empresa, a quien el Ministerio de Defensa ha adjudicado el servicio de conserjería del Museo del Ejército, "viene desde hace meses retrasando los pagos de las nóminas a sus trabajadores y acumulando a menudo mensualidades impagadas".
CCOO explica que el pasado 15 de abril, la empresa se comprometió ante la Inspección de Trabajo a saldar "en una semana" la deuda salarial que mantenía entonces con sus trabajadores. Además, Proman también aseguró que se regularizarían los pagos de las nóminas, algo que debía iniciarse con la nómina del mes de junio de 2016 que debía pagarse del 1 al 5 de julio, según consta en el acta de la Inspección.
Con este compromiso, Proman "evitó en aquel momento ser sancionada por sus reiterados impagos salariales", asegura el sindicato, que también puntualiza que el inspector hizo constar que no daba el expediente por cerrado y que comprobaría que el compromiso se cumplía en las fechas establecidas.
“Sin embargo, lejos de normalizar el pago de los salarios, estamos a 21 de julio y Proman adeuda en estos momentos a sus empleados no sólo el mes de junio sino también el de mayo. Y apenas quedan unos días para que también les deba julio”, denuncia Antonio Alonso, del sector de Construcción y Servicios, quien también ha asegurado que los responsables de la empresa ni siquiera se han presentado hoy al acto de mediación previo a la convocatoria de la huelga.
Los conflictos laborales son "constantes" desde que Proman se hizo con la contrata del servicio de consejería del Museo del Ejército. "Nada más llegar se negó a subrogarse a los trabajadores de la anterior contrata y despidió a todos los que no aceptaron novar sus contratos y rebajarse los sueldos, que apenas llegan a 700 euros al mes –incluyendo la prorrata de las pagas extra", señala el sindicato.
CCOO ha interpuesto varias denuncias judiciales, que han llevado a los tribunales a condenar a la empresa. "Ahora, cuando habíamos llegado a un acuerdo ante la Inspección de Trabajo para normalizar la situación al menos con el pago puntual de los salarios, nos encontramos con nuevos incumplimientos a costa de los trabajadores, que malamente pueden salir adelante con los salarios tan bajos que cobran y que lo están pasando muy mal, ellos y sus familias, cuando ni siquiera se los pagan y llevan casi tres meses sin ingresar nada”, critican.