Desde el pasado viernes lucen en el balcón del Ayuntamiento los gigantones de Toledo, señal inequívoca de que la ciudad está de Fiesta. Firmes y orgullosos, contemplan desde las Casas Consistoriales las idas y venidas de toledanos y visitantes en una ciudad que ya va despertando de un mal sueño. Un año más, no podrán salir por las calles del Casco Histórico con motivo de la Feria y Fiestas de Agosto, que hoy tiene su jornada más importante, el Día de la Virgen del Sagrario, Patrona de Toledo. Las circunstancias obligan, de nuevo, a mantener la responsabilidad y celebrar unos festejos adaptados a las condiciones sanitarias provocadas por el coronavirus.
Ha sido un año y medio muy duro. Siempre permanecerán en nuestro recuerdo los familiares y seres queridos que esta maldita pandemia nos ha arrebatado. Así debe ser porque es la manera de que permanezcan vivos para siempre en nuestros corazones. Pero, echando la vista atrás, debemos sentirnos orgullosos de la entereza, la responsabilidad y el compromiso con que hemos afrontado este periodo tan doloroso de nuestra historia reciente. La serenidad y la solidaridad primero; la capacidad de adaptación a una realidad nueva, después, y, ahora, el éxito colectivo que supone el buen ritmo de vacunación nos están permitiendo superar las dificultades.
En 2020 tuvimos que suspender las actividades, pero lo que nunca hemos dejado de hacer es mantener viva la ilusión. Eso nos permite hoy retomar y renovar las tradiciones justo en el punto en el que las dejamos, porque, a pesar de las limitaciones, siempre han estado presentes en nuestro sentir como toledanos y toledanas para que vuelvan con todo su esplendor cuando las condiciones lo permitan.
Este año, el Ayuntamiento ha realizado un gran esfuerzo para que la feria, con su alegría y su bullicio, vuelva a Toledo, contribuyendo con ello a insuflar un halito de optimismo, desconexión y felicidad a los vecinos que quieran disfrutar de sus Fiestas de Agosto. Todos necesitamos estos momentos. Paso a paso, palmo a palmo, vamos ganado terreno hacia una situación cotidiana más normalizada y estas fiestas que hoy celebramos son un buen ejemplo de que caminamos en la senda de la recuperación y de que, si lo hacemos juntos y unidos, más rápido avanzaremos en la buena dirección.
Unos festejos que tienen hoy, como decía antes, su Día Grande con la Festividad de la Virgen del Sagrario, una celebración que se ha mantenido durante siglos, una tradición toledana que representa lo mejor de nosotros mismos, que vivimos con orgullo, con emoción y con un hondo sentimiento toledanista. Sentimientos que la hacen una tradición fuerte, sólida y poderosa sobre la que debemos apoyarnos, como siempre han hecho las generaciones que nos han precedido, para superar las dificultades actuales y mirar con esperanza nuestro futuro.
El respeto, la concordia y la tolerancia son señas de identidad de nuestra ciudad a lo largo de los siglos. Nuestro patrimonio histórico y monumental, nuestro sentir como toledanos y nuestra proyección al mundo se han elevado sobre estos cimientos. Vivamos estas fiestas cada uno a la manera que mejor entienda conforme a sus propias creencias, desde el recogimiento íntimo religioso a la algarabía del recinto ferial, pero siempre con esos ideales que nos han convertido en la ciudad orgullosa, viva y abierta que somos hoy.
Toledanos y toledanas, ¡Feliz Día de la Virgen del Sagrario!
Milagros Tolón Jaime
Alcaldesa de Toledo