El pleno del Ayuntamiento de Illescas debate este jueves la amortización de seis puestos de trabajo -tres de educadoras y tres de personal de apoyo- de las escuelas infantiles municipales -Truke y Canicas-, una decisión que ya se quiso llevar a cabo el pasado año mediante la supresión de tres puestos más (9) y contra la que se manifestaron las propias trabajadoras de estos centros y las familias que llevan a sus hijos/as a los mismos.
Por ello, se ha convocado una concentración a las 9.30 horas en la puerta del Ayuntamiento, situado en la plaza del Mercado, antes de que dé comienzo la celebración del pleno -a las 10.30 horas- para reivindicar el mantenimiento de los seis empleos en este servicio público, "un instrumento fundamental de conciliación para las familias del municipio", según trasladaba IU Podemos (Unidas por Illescas). Esta formación, al igual que ya hizo el PP hace unos días, rechaza la supresión de estos puestos ya que considera que supondrá "un menoscabo del servicio y una mayor incertidumbre para las familias".
En estos dos centros, que acogen a niños y niñas de 0 a 3 años, trabajan un total de 27 mujeres que se han enterado "por casualidad" de la modificación de la relación de puestos de trabajo (RPT) planteada por el equipo de Gobierno -PSOE-. "No nos han dicho nada directamente", lamenta en declaraciones a este medio una de ellas, que cree que podría ser una de las afectadas por antigüedad y que reprocha también que la decisión se haya llevado a cabo durante el mes de agosto, cuando disfrutan de su período vacacional.
Ya el pasado año, el equipo de Gobierno achacaba esta supresión a "la disminución de matrículas" para el pasado curso escolar (2020/2021), en el que indicaba que se habían cubierto el 40% del total de las plazas. "La realidad es que hay menos niños pero también hay más trabajo porque hay más medidas a adoptar a causa de la pandemia", defiende la trabajadora, que expone también que la amortización de estos puestos "revierte en el trabajo sobre las que se quedan".
"Con menos personal no sabemos cómo se va a llevar a cabo", agrega también sobre el trabajo que están llevando a cabo con grupos de convivencia estable -grupos 'burbuja'- para evitar la propagación de contagios de COVID-19 en aulas en las que el alumnado, por razón de edad, no ha recibido la vacuna.
"Cada vez hay más personas viviendo en Illescas. ¿Qué va a pasar en septiembre si la gente se anima más y se pueden abrir más clases?", cuestiona también la trabajadora, que también rebate el "desequilibrio económico" al que aludía el Ayuntamiento para llevar a cabo esta modificación de la RPT: "Illescas puede presumir de tener superávit", subraya.
En este sentido, Unidas por Illescas lamenta también que se plantee de nuevo la amortización de puestos de trabajo en estas escuelas "unos meses después, a pesar de disponer de un número mayor de matriculaciones en los centros y cuando la crisis sanitaria aún no está resuelta". Además, destaca que "mantener las burbujas en el aula y desarrollar un protocolo COVID-19 seguro es imprescindible para preservar la salud de colectivos tan vulnerables como son los menores, los abuelos y las propias trabajadoras".
"Nocturnidad y alevosía"
Por su parte, el PP también criticó la gestión que se ha realizado ante esta situación por parte del equipo de Gobierno, al que acusa de haber actuado "con nocturnidad y alevosía". "En plena quinta ola de la pandemia y en un momento en el que más que nunca se necesitan a estas trabajadoras que están haciendo un trabajo extraordinario y excelente con los niños tal y como se ha demostrado este último curso", expuso la portavoz del Grupo Municipal Popular, Alejandra Hernández.
A juicio de la también diputada provincial "se necesita a todo el personal" que hay actualmente ya que el trabajo "va a ser imposible que se lleve a cabo de la misma manera con la mitad del personal para garantizar los grupos 'burbuja', para tomar la temperatura o para lavar y desinfectar las manos y el calzado a los niños y niñas".